miércoles, 26 de diciembre de 2012

¡DE GACELA A CENTELLA!

Me remontaré a algo que pasó hace ya un rato, y que hoy me hizo pensar en aquello. Fue hace un par de meses, una mañana en la que , para variar , iba tarde y llegué a mi parada del alimentador solo par ver al bus cruzando la calle en el siguiente  semáforo, rumbo a la siguiente parada que no estaba muy lejos de donde acostumbro a esperarlo, con una cuadra de ventaja. En ese momento pensé ¿Patitas pa' qué las quiero si no es para alcanzar ese hijo de su madre bus? Y sin perder más tiempo me eché a correr de la única forma en que se correr ; como un niño. Pero mi carrerón tuvo que detenerse en el mismo semáforo en el  que un minuto antes había visto al bus , ahora estaba en rojo y una corriente interminable de carros particulares me separaba del objeto de mi persecución . (Malditos snobs y sus carritos sin pico y placa)
 
Habiendo perdido la esperanza y el aire , levanté la cabeza y me dí cuenta de que el bus seguía parado en el centro comercial (la parada siguiente a la que yo espero) esperando a una mujer que a lo lejos pude identificar como una oficinista equis , que a pesar de que iba tan tarde como yo (supongo) tenía a su favor encontrarse del lado correcto del semáforo y el hecho de que el conductor ya había notado su maratón entaconada. Finalmente la cola de carros me dejó un pequeño espacio por el que pude cruzar la calle , y retomando mi pique de ratero logré alcanzar la lejana puerta del bus, desparramándome en la primera silla libre que encontré . Mientras abordaba justo antes de la oficinista equis , el chofer con una sonrisota en la cara me dijo algo como "uyyy pelao' yo lo veía por el retrovisor y eso parecía una gacela". Y es precisamente esa palabrita la que le sigue causando tanta gracia a Mabel* y la que seguimos usando para burlarnos cuando nos toca pegarnos la carrerita detrás de un bus alimentador , que como ya habrán notado ustedes queridos vomitadores, para mí es cosa de cada semana.
 
Por lo tanto una pequeña parte de mí ya estaba lista para gaceliar ésta mañana en la que, una vez más, salí de mi casa con cinco minutos de retraso rumbo a un encuentro formalito que eseraba yo que se convirtiera en un desefrenado día de sorpresas. Una mirada rápida hacia el semáforo , bastó para confirmar mis sopechas : El alimentador , ese bucecillo verde de esa empresa masomenos funcional , ya había pasado por mi parada y se alejaba de mí con paso lento pero constante . Mis reflejos gacélicos se pusieron en marcha y un segundo después ya estaba corriendo como niño poseído en plena carrera 113. Pero el maldito semáforo volvió a hacerme la misma de hace unos meses , dejando seguir al bus y cambiando inmediatamente a rojo para impedirme el paso. Lo malo es que esta vez no habría oficinista equis y sus eficientes tacones que me salvaran . El bus siguió su camino , sin mi , y yo ya estaba resignado a llegar tarde y a caminar hasta el portal de transmilenio. Sí , yo sé , tanto drama y tanta carrera sólo por no caminar un poco... pero es que es el portal 80, y no es que sea cerca... no tanto como para ameritar una caminata apresurada . En fin.
 
Estaba en esas cuando un motociclista me llamó desde el otro carril :
 
Motociclista : Men , ¿necesita alcanzar ese bus?
 
No marica, me gusta correr detrás de buses random y después contemplar cómo se alejan -pensé-
 
Yo : Ehmmm , si.
 
Motociclista : Súbase , yo lo arrimo a la otra parada .
 
¿Y si el sujeto este quiere robarme? ¿Y si me secuestra? Mmmm , ¿Y si es Tatan Mejía ocultado su identidad debajo de ese lustroso casco? ¿Subirme a la moto de un desconocido o irme a pié y llegar tarde?
 
Yo : Mmmm bueno.
Motociclista : Hágale que alcanzamos la próxima si nos vamos por la 83
Yo : Pero váyase a mil, porque ya debe estar dando la vuelta.
 
Dicho esto me trepé a la moto , el muchacho este le metió la chancleta y comenzó a perseguir a ese bus metiendose entre dos filas de carros . Y allí iba yo , sintiendome el copiloto del mismísimo Centella (el ánime ese japonés de los años jupa), con el viento helado en la cara y un poco de susto porque este tipo de cosas no pasan todos los días. Afortunadamente la persecución no duró mucho , alcanzamos el bus gracias a un trancón que se había formado antes de llegar a Unicentro occidente. Mi Tatán Mejía personal dió un último acelere y me dejó justo en frente de la puerta de la mitad .
 
Solo me quedaba agradecerle a éste sujueto que cual Zorro del nuevo milenio, (vestia ropas negras y su moto aún más negra) me hizo una leve señal de "deber cumplido" con sus cejas , despedirme de él y bajarme de su moto . Pero por supuesto no podía faltar el tropezón-casi-caída , como si el chofer y demás pasajeros del alimentador no tuvieran ya suficiente material para burlarse de mí en silencio y sin que yo lo sepa . Y así fué como pasé de gacela a capitan Centella , sólo por no programar el despertador unos quince minuticos más temprano .
 
No me vengan a decir que  no es cierto que ésto solo me pasa a mí... o cuantos de ustedes han aceptado un aventonsito  de un extraño así impulsivamente y se dejaron convencer por una vocecilla chevere  y un perfumillo de aroma a dioses olimpicos y la sensación de motocicleta a toda velocidad apenas para salir volando . . .  solo me pasa a mí . . .
solo por curiosidad, quisera saber si les ha pasado algo parecido... comenten y tal vez hagamos unas historiecilla con eso ;)
 
*Mabel es una compañera de universidad con quien recientemente hemos tenido como constante tema de conversación, nuestras peleas con el transporte público y la vida en general.
 

miércoles, 21 de noviembre de 2012

NO TE ENAMORES DE MÍ



Muchos piensan que si su ligue de la noche anterior les llama para tomar café es porque se ha enamorado y se quiere casar con ellos. Confunden el interés con el amor y se agobian. Pero, ¿de quién es el problema? ¿Del que llama o del que se agobia?


“No le llames todavía. Si lo haces parecerás demasiado ansioso y va a pensar que estás recolectando babas en un valde”. “No quedes dos veces con el mismo, no se vaya a creer que estás enamorado”.

Echar mano de ciertas dosis de frialdad cada vez que estamos lo suficientemente enajenados mentalmente como para relacionarnos con alguien en plan rollo /follamigo /noviete /consolador industrial, está muy de moda. Está tan de moda que en cuanto un individuo nos muestra un poquito de afecto o atención (nos trata bien, nos manda un mensaje, es atento) en lugar de regalarnos toda la indiferencia del mundo, nos agobiamos. O sea, que cuando alguien muestra un mínimo de interés por otra persona, esa persona lo malinterpreta y termina pensando que, poco más o menos, esa muestra de interés significa que el sujeto en cuestión está a punto de aparecer acompañado de una tuna, arrodillarse, enseñarle un anillo de diamantes y pedirle matrimonio.

A todos nos ha pasado (si, asi sea solo una vez). Hemos conocido a alguien, hemos congeniado, hemos tenido carricoche y a los pocos días hemos pensado que sería una buena idea llamar haciendo uso de esa cosa que se denomina teléfono móvil (y que, al parecer, se dice, se comenta, que sirve para algo más que para poner la alarma con el fin de despertarte por las mañanas para ir a correr detras del alimentador). Almas cándidas que somos (qué tonticos) hemos llamado a esa persona y le hemos propuesto quedar para tomar un sencillo y nada comprometido capuccino en "Juan Valdéz". Y esa persona no sólo se ha sentido sorprendida, violentada y desconcertada ante la proposición, sino que entre nervios y tartamudeos te ha contestado con la voz quebrada por un grito ahogado que la estás agobiando y que la dejes en paz. Es muy probable que a continuación, aunque tú no pudieras verlo, haya tirado el teléfono al suelo totalmente aterrorizada y se haya dejado caer hecha un ovillo, al tiempo que llamaba a su madre entre sollozos. Cual primera escena de Scream.

Bien. Ante esta situación es muy probable que te sientas como un auténtico psicópata o como un desesperado-degenerado-desquiciado de tres al cuarto. Poco más o menos te han hecho sentir como si hubieras estado espiando a tu ligue mientras te tocabas con los ojos vueltos, ataviado únicamente con una gabardina, en medio de un parque infantil. Pero tengo noticias para ti: a menos que estés en la nube voladora de Gokú y realmente obsesionado y te hayas dedicado a llamar a ese tipo(a) 23455'65 veces para pedirle una cita, no eres un psicópata; eres una persona normal que llama a otra persona aparentemente (pero sólo aparentemente) normal para tener una cita. Es decir, que el problema no lo tienes tú, que sólo querías tomarte un tinto y si acaso echar otro casquete pa' darle gustirrin al cuerpo, sino ese individuo con un miedo patológico al compromiso que se piensa que por quedar dos veces con la misma persona está embarcándose sin remedio en la senda que conduce a casarse y tener 234 hijos y un perro labrador en una cabaña junto a un lago.

Y es que sus mentes están distorsionadas. Ellos solos se lo guisan y ellos solos se lo comen. Se montan la película. Y encima te hacen creer que el problema está en ti (es que viejo, mire usted es como raro ¿cierto? como se le ocurre llamar a alguien para tomar café). Esto se extiende a otras acciones cotidianas y normales que son tomadas como auténticas amenazas contra la integridad del codiciado soltero, estableciéndose así la siguiente tabla de equivalencias:

-Te llamo = Quiero casarme contigo.

-Te digo que me caes bien = Estoy profundamente enamorado de ti como nunca lo he estado de nadie.

-Te puedes quedar a dormir en la sala = Me encanta pasarme las noches en vela mirando cómo duermes.

-Te doy un beso sin que estemos follando = Quiero despertar cada mañana a tu lado y que me digas “buenos días, principe” mientras suena Luis Fonsi en la radio.

-Te rozo la mano sin querer cojerla del todo = Quiero que tengamos hijos como para hacer un equipo de fútbol.

-Te digo que me agrada estar contigo = Quiero envejecer a tu lado y que veamos la tele local en el porche el resto de las tardes de nuestra vida mientras tejemos sacos de punto para nuestros nietos.

-Te invito a cenar en un MacDonald's = No puedo vivir sin ti y voy a dedicarte la canción de El Guardaespaldas en un karaoke (and IIIIIII iaaaa will always loviuuuuuuuu uuuuu). Incluso pretendo drogarme para parecerme más a Whitney Houston y que tú seas Kevin Coñe (o al contrario).

Incluso el mero hecho de dar el teléfono a la persona que te acabas de zumbar parece estar comprometiéndote demasiado. Siempre surge la frase de cajon, esa que parecen haber aprendido todas las personas en el kinder un día que yo falté a clase: es que no quiero que te enamores de mí”. Como si tú fueras lo suficientemente estúpido a estas alturas de tu vida (con tantos tiros pegados) como para enamorarte de ellos sólo por echar una palabrita al son de un té o como si ellos fueran estupendérrimos e irresistibles e inevitablemente, por ciencia infusa, suscitaran ese sentimiento en nueve de cada diez pendejos ( no me mires mucho ni te arrimes demasiado a mí, no vaya a ser que te vuelva loco(a) y ya no puedas vivir sin mí) y como si tú no supieras cuidar de ti mismo.

Lo que quiero decir es que en ocasiones confundimos el tocino con la velocidad y creemos que el mero hecho de mostrar o que muestren cierta consideración hacia nosotros (como seres humanos, compañeros de especie y esas cosas, personas, sin nada romántico de por medio), nos está comprometiendo a algo más o nos está implicando en esa palabra de cuatro letras que todos ansiamos pero cuya mera pronunciación nos horroriza ("amor").

A veces no es necesario buscarle los tres pies al gato. Una llamada es una llamada. Un folle es un folle. Una cita una cita. Y enamorarse es enamorarse. Son cosas distintas. Y en la mayoría de los casos dos personas que se la pasan bien estando juntas no son más que dos personas que se la pasan bien estando juntas. Nada más. Y nada menos.

lunes, 12 de noviembre de 2012

PARANOIA BANCARIA

Existen bancos tan despreciables como sus cajeros , digo , esos que caminan , porque poca diferencia hay entre el trato y la automatización .  Ambos hablan , pero hay algunos tan intimidantes que la pobre gente hasta se acicala un poco y se arregla las vestimentas cuando les llega el turno. Ni modo de hablar a un tono de voz normal, pues es una ceremonia tan sublime como recibir la comunion en las iglesias católicas. Todo ésto sin mencionar mi nemesis de los tramites (la fila) y  la rígida y absurda compostura dentro de éstas entidades; Ni se le ocurra mirar su telefono celular, la paranoia los trajo hasta el punto de impedir contestar un teléfono , porque esque todos somos potenciales malandros en aras de hacerle algun mal al banco. Textos, periódicos, libros o cualquier lectura tampoco se admite porque seguramente algo maléfico y detestable está tramando ... y a no ser que esté tramando como hacer el arroz el día que esté solo en casa jamás pierda su mirada en algo que otros no puedan deducir que es. Digo ésto sabiendo que he ido a bancos donde la gente aún es humana , respira, habla , maldice , raja del prójimo , lo llaman por teléfono y en ocasiones haya café con música a volumen alto , ¡en serio!
 
Comprendo las brutales y deseperadas medidas contra el robo , pero ¿que acaso los bancos no están asegurados? en el peor de los casos olvidandose de lo que le suceda al usuario de puertas pa' fuera. Pero lo que mas me ofende y definitivamente me indispone sobremanera (aparte de las odiosas filas) es que se ensañen con una de las quien sabe cuantas personas que entran a una entidad bancaria, como me pasó hace algunos días;
 
Se acerca un joven "guachiman" de éstos encargados de la seguridad del banco y me dice que si le colaboro con el sombrero , a lo que le contesté que en realidad muy poco podia hacer por el diseño de su kepis, que yo era diseñador gráfico y que mejor consultara con un diseñador de modas . Me dice que no , que me quite el mío y yo enseguida le contesté que no queria hacerlo y le pregunté que cual era la paranoia con la gente , ya exaltado el vigilante éste me dice que son ordenes y que debo hacerlo . Con la sangre empezando a hervirme  le pregunto ¿y de quien son las ordenes?, ¿de Dios?  le hable de la chica rubia que había mas adelante con una boina y ella no le dijo nada, al anciano delante de mi que llevaba un sombrero parecido al mio pero increiblemente feo y descuidado al cual no lo reprimen , ya muy enojado decidí quitarme el sombrero , pero pocos minutos despues  entra un uniformado del ejercito con gorra, y una agente de policia (muy rechoncha por cierto) tambien con el caracteristico kepis y a ninguno le dicen nada . Decido ponerme mi sombrero nuevamente . Viene otra vez el guachiman ; "¿se lo quita por favor?" y sin deseos de ser educado le respondí: ¡comenecemos por la suya y la de los otros dos que acaban de llegar!  "es diferente porque hace parte de un uniforme" me dice el pendejo éste y le respondi: ok , éste sombrero es parte de mi elección personal, eso tambien maraca la diferencia ¿o no?
 
El joven guardian se marcha de enfrente de mi cara muy aburrido . El resto del público ríe y mientras los uniformados se quitan sus repectivas gorras, yo guardo mi sombrero en señal de consideracion mas no de respeto , pensando en las decenas de bandidos con gorra que me pueden atracar si decido seguir la estructura de indumentaria en al entidad bancaría. Me pregunto luego ¿Y si me diera por entrar con antifaz?
 
Finalmente llega mi turno, y oh sorpresa, me ha tocado cajera!

miércoles, 7 de noviembre de 2012

SE BUSCA... (micro vómito)

 
se busca alguien de labios suaves e incitantes
que sepa lavar
y que sepa destender la cama
para irnos a besar.
 
Que en sus brazos me sienta
un niño pequeño
sonría , le mienta
y se trague mis penas .
 
Que sacuda mi cama
como un animal
y que por las mañanas
me dé un poco más .
 
Que no sea muy malo
que no sea muy bueno
y si me hace regalos
que no le cueste dinero .
 
Alguien que cuide de mí
que quiera matarme
y se mate por mí

domingo, 4 de noviembre de 2012

SUS MANOS...

Me debe sus manos ; me he querido consagrar a manos anteriores , dejarme seducir por la líneas de memoria , fundirme en el blanco tapíz que termina en las yemas de los dedos . No lo logro . Busco y rebusco sin afanes y sin resultados .

Busco sus manos para dejar caer mis lágrimas matutinas e imaginarias . Manos para compartir mi ya venenosa sangre . Manos pata apoyar mi cínica sonrisa . Manos para jugar con áspera barba . Manos para el presente .

 
He decidido dejar hablar a sus manos . Nuestro primer encuentro , y su primera sonrisa siguen dandome vueltas . Pensamientos como el rizoma de una planta que lo inunda todo , que todo lo comparte , que todo lo contamina , que todo lo hace suyo sin tenerlo . Rizoma que busca una respuesta .

Y lo sé . Veo la inconformidad en su cara , en su cara que he guardado como imagen de fondo en mi cerebro , detrás de mis ojos . Sin que usted se hubiera percatado observé la noche con su aliento de fondo . Experiencia de un abismo cómodo de una cárcel de fantasía , de la guarída de un búho vespertino.
Sabemos , si , lo sabemos , soy falto y corto de elocuencia , mi instinto racional anti-paradójico me proporciona la actitud necesaria para sobrellevar sus palabras , que , por cierto , no dejan también de ser sonidos , como canciones , como serenatas , como pájaros .
Pensemos en el colibrí , en el ser colibrí . Debo decir que me inquieta (aclaro que inquietud es movimiento y seducción) . Ser colibrí no puede "superficializarse" en un parecer . ¿Representación o resignación? Dos puntos ; ir, es decir , volar de flor en flor, escoger, oler , penetrar , absorber y dejar morir .
Quiero apoyar mi cabeza en su hombro mientras me conduce bajo la lluvia que tanto le gusta ver caer y que esta semana aún no ha caído.
 

jueves, 2 de agosto de 2012

YO ANTINOMIA

Mi TL en Twitter, se mueve, y se mueve intensamente.  Y esque las personas a las que sigo, siempre tienen algo que decir. Unos son ingeniosos y te dicen las verdades de manera muy jocosa, otros son más agrios y algunos plagian frases sabias de gente ilústre (lo digo porque ni siquiera ponen comillas en la frase). Pero siempre logro encontrarme con cosas que me alegran el día, me sacan una sonrisa o de plano me ponen a reflexionar por milésimas de segundos sobre mi función en éste planeta, y por eso he querido compartir algo de lo que algunas de esas personas inspiradas por el inconformismo y las vicisitudes de la vida logran plasmar en finos tweets y estados de facebook, que logran pasar esa barrera en mi mente de "una cosa más" a "una master piece"

@Yo_Antinomia es el seudónimo que usa uno de mis más ilustres personajes en twitter. Es uno de mis favoritos y aunque sus encarnables frases ya no me aparacen tan a menudo, sé que éste extrañisimo ser humano tiene mucho por decir, y sabe cómo hacerlo, sabe cómo sacarle provecho a las redes sociales, sabe como convertir algo simple en algo de tamaña categoría, y lo mejor sabe como sacarle suspiros a mas de uno (incluyendome). 

Éste personaje en particular, dedica sus trinos a la crítica política, a la defensoría de la marihuana como único desestresante, al sexo y al erotismo entre hombres, y alguna que otra salida tipo hipster entre otras cosas. Segun su bío en en la red social de moda es un "humano demasiado humano", y se autodenomina como irreverente, misántropo y jodón. La primera impresión que éste estudiante de Filosofía de la Universidad Nacional de Colombia dá es un tanto agresiva y sientes que podrías morir con cualquier fulminante frase que pueda lanzarte, sin embargo al ver sus escritos y al conversar con él se dá uno cuenta, que es más bien como esa brisa de verano que suele uno disfrutar en el momento menos pensado.

Lo que escribe, a pesar de hacerlo público, no es para todo el público, sin embargo no me podía quedar con las ganas de compartirles algo que alguna vez escribió y que de alguna manera me gustó. No cómo me gusta leer a Laura Esquivel, o a Agatha Cristie, más bien como cuando se descubre que se tiene un placer chiquito circundando por los poros de la piel, esperando ser activado.
No tiene título, ni entrada elegante, pero sí algunos likes en Facebook, asique ¿por qué no? 
Ahi les va.

"Sabe que mejor que no hubiera ido... ¿qué tal yo todo pendiente, cuando las hojas ignoran y sólo se dejan llevar por el viento? Menos mal que no fue, que no fui y que nunca más iré, ni vendrá.
Se fue, me fui; no fue, yo me quedo.
¡Padre nuestro que estás en el río, en la tierra, en el sol y en el viento!
Que'l día en que caiga en la tentación de caer en tentaciones, tu brazo fuerte me llene de nat...
uraleza para distraerme (en realidad pensar otras cosas), con una sonrisa en la cara y la estupidez a flor de piel.
Que no haya paz en su recuerdo, pues la paz me llevaría a no olvidar y prefiero que se vaya por completo.
¡Seguro que al rato estarás volando inventando otra esperanza para volver a vivir! Nadie te puede dar una respuesta ni decirte qué puerta hay que tocar. A pesar de tanta melancolía, tanta pena y tanta herida: ¡sólo se trata de vivir, y de vivir feliz! (Solo se trata de vivir, Nebbia).
¡Vete! Adiós... me despido, me voy.
Si te quieres quedar, espérame. Nunca volveré, nunca estuviste... nunca estaremos.
Ayer que toqué tu recuerdo fue el mañana que nunca llegó hoy.
Si te quieres quedar con tu soledad, que te pinte la noche y te abrigue el frío. Mis manos no trazarán sobre ti, ni mis brazos cobijarán los tuyos. Recuéstate en las piedras, apoya tu cabeza sobre esta punta.
¡Adiós! No nos volveremos a ver. Nunca nos vimos y hoy no será el momento de volvernos a ver.
Sabes que si prefieres tu soledad y agradecer mi no compañía, te puedes quedar solo y agradecer eternaMIENTE mi ausencia.
¡Adiós! ¿Adiós?
¡Adiós!"

jueves, 12 de julio de 2012

INSOMNIA






De la noche a la media noche, llega la madrugada. Tienes que levantarte antes de que salga el sol del chocolate; y ese par de ojos personal e intransferibles nada que se cierran . O, peor aún, se cierran los párpados, como cubiertos por dos centavos de chocolate; pero la mente, ahí, encendida, como una moto sierra de pilas, carcomiendo tu conciencia. Ni el mítico Morfeo ni el hipnótico Hipnos aparecen por ahí. Las ovejas contables, ariscas están . . . y el cielo raso se llena de asteriscos imaginarios. Comienza ese infierno en vigilia llamado insomnio y sabes que vuelve la batalla entre tú y tu cerebro que se han de tragar los zombis .

El pálpito de que esa noche no vas a clavar el pico te llega desde que haces el rito de ponerte la pijama, por fuerza de la costumbre nocturna, como por jugar el juego de "a que hoy si me duermo". . . pero sabes que no, que la ausencia de bostezos, que ya deberían estar floreciendo, es una mala señal . Entonces destiendes la cama, entonces rezas tus maldiciones; entonces apagas la luz (bueno el bombillo ahorrador de oscuridades); entonces oyes, sin oírlo ese pitico como de "fuera del aire" en tus linfocitos . Todo mal, todo muy mal .


El profundo sabor de éste desorden del sueño (muy ordenado, por cierto) hace erupción cuando a los pocos segundos de ese estímulo mental (con o sin posterior orgasmo) , sientes con toda la lentitud del tiempo, esa combinación de ganas de morir, más la sensación de inmortalidad, y nadie para compartirla ( o al menos nadie significativo, nadie que lo pudiese entender). Las paredes magnifican reflexivamente el sonido del vacío que te contiene, el que contienes. La gotera in crescendo, el último trago de saliva, el mosquito de la una vampirillo sediento de ti.


De puro Optimista, bebes el vaso de leche tibia recomendado por tu sonámbula madre, envenenado con ese placebo llamado valeriana; Lees por décima vez ese libro que tanto te costó devorar, o aquel que disfrutaste hasta el último punto; miras once minutos de canal de congreso, otros veinte más a las caricaturas de la madrugada y te alertas de sus mensajes subliminales; oyes cualquier programa radial de amanecidos suicidas sin bala . Y nada . Ahora la cabeza está más contaminada de imágenes y palabras ajenas . El mundo gira sobre tu eje, y tú, bajo las sábanas, una vuelta cada cuarto de hora, desordenando tus venas, como un pollo que se auto asa en las llamas imaginarias del desespero .


Entre más pretendes dormir, más allá se alarga la cuerda de la cometa del sueño, esa pequeña muerte reversible que no llega . Hay que fingir que no se le desea, como se finge calma ante una banda de atracadores que se acercan por tu acera . No pensar en él . Ese es el viejo truco : desconectar a la mente de la mente . Muy zen . El otro truco es ir hacia el otro polo : Concentrarte en tu propio insomnio hasta el tuétano de su inmaterialidad, mirar al horizonte de tus párpados . No es un chiste . Sondearlos, descifrar sus jeroglíficos de venas y membranas, reconocerse en ellos, tomarse literalmente aquello de "mirar para adentro" . Allí, ante ti, a medio milímetro de tus pupilas, está la verdad esencial : eres la punta de ese iceberg llamado universo, alias cosmos . . . y tú, convencido de que el caos habita en ti .


Amigo insomnista: Te recomiendo que , cuando el sueño te dé una "bitch slap" para evadirte, dejate llevar por las ondas del tiempo . El tal tiempo es un concepto, aquí y el extinto Cafarnaúm . Es un delirio colectivo generado desde la invención de los relojes . Si no le pones cuidado , el sueño , necesario para que no mueran tus neuronas en el camino, llegará . Gózate el pequeño delirio de estar contigo mismo, alimentándote de tus propios pensamientos, como la milenaria serpiente que se traga a sí misma sin tragarse del todo.


Una cosa es estar insomne, y otra serlo . Profesar la viglia del vigilante que vela el sueño distante del mar de soñadores que ignoran nuestro acto de fe en la humanidad inconsciente . De no ser por nosotros los insomnes, los despiertos del lado oscuro de la tierra, el mundo entero colapsaría de cordura . Cuando los somnes despierten de sus ocho horas estériles, deberían agradecer nuestro sacrificio (in)voluntario .


. . . Y al que madruga insomne, ¿ quién diablos lo ayuda?

sábado, 23 de junio de 2012

¡HAPPY BIRTHDAY!


Ha sido un año intenso, fugaz, efímero y lleno de cosas várias, unas buenas, otras malas, otras muchas muy malas, y ninguna tan buena como para causarme un orgasmo (literalmente hablando). Mi alter ego ha trabajado arduamente por hacerme vómitar, al parecer la universidad pública es un espacio donde no solo se va a aprender sobre inconformismo, lucha deshinibida por algo y adaptación a gases lacrimógenos, tambien es un espacio lleno de actitudes que le dejan pensando a uno cosas que empiezan con frases tales como "y que tal si..." "cómo sería si..." "y  si de pronto..."  Situaciones hilarantes, unas muy del común, escenas de telenovela colombomexicoargentinovenezolanas y casos dignos de mostrarselos a la "señorita laura". Sí . Allí en esa alma matter he encontrado personajes que sin quererlo (y sin yo quererlo) se convirtieron en mis musos, en los porvocadores de esos vómitos, de esas inesperadas eyaculaciones mentales, inducidas por su fiel comportamiento de selva adolescente donde es importante ser alguien, donde la participación en clase defíne quien eres y que papel juegas en esa selva, donde nadie hace algo desinteresado, donde puedes pasar en un segundo de ser predador a ser la presa, donde la simbiosis es escaza, las manadas suelen ser traicioneras y progresivas (sin embargo es importante estar en una) y los reyes se alzan coronas  plasticas con rugidos ácidos y venenosos.

Pero no voy a hablar de la jungla vivida en mi sitio de "preparación para el futuro", no señores, rajaremos ponsoñosoamente de ése sitio despúes. Para éste post éstamos de fiesta, porque logramos mantener un año vivo éste blog que se llena de guarradas, de verdades que pocos ven y de pendejadas sin sentido escritas por un pendejo fuera de sí.

Vómitos mentales es el hermanito menor de "Que putas" y "Café Amargo" mis dos anteriores blogs que dirijía de la mano de otro par de desocupados amigos mios, cuyos corazones rotos por malevolas féminas interfirieron dejandome solo y con muchas cosas que decir. No lograron cumplir el año al igual que éste blog, gracias a la permanente presencia de insultos, y palabras fuertes de muchos de nuestros seguidores y/o lectores que en realidad eran un séquito de detractores frígidos, amargados, "freakis", "for ever alone" mojigatos faltos de sexo a quienes la palabra Tabú era demasiado para ellos. Las reglas "bloguisticas" dicen que si se recibe demaciadas denuncias y palabaras fuertes tu blog será cerrado y en efecto pasó dos veces. R.I.P para "Que putas" y "Café Amargo". Pero hoy celebro que éste vomitadero dá sus primeros pasos y se le enciende su primera velita gracias a que ha conservado esa esencia tranquila que mojigatos anónimos que aveces comentan por ahí saben gustar.

5 seguidores públicos y 85 anónimos tiene yá a la fecha éste pequeño blog hecho para el que sea, para el que se anime a leer sin pereza, para el que quiera identificarse y chantarse el guante, para el que no tiene que hacer despues de las 10:00 pm, para el curioso que solo ojea los títulos, o para la persona a la cual tomo en mis brazos y le doy sensuales mordiscos en mi imaginación.
Por ser Nuestro primer año me dí a la tarea de recolectar saluditos de happy birthday, para mis vómitos mentales,  los suyos, y de los otros. Amigos todos, gente como yó o gente como ústed señor lector ábrieron su fauces y ésto fué lo que vomitaron:


"No mames, ya no das risa cómo antes. Matate! Feliz cumple vomitón"
Alejo Mole:  @tumeromole

"Cuando quiera leer algo pendejo le aviso. Por ahora que sean muchos años más"
Michel Pesquera: @michelpesquera

"El blog es algo muy de usted, no me esperaba menos, buen trabajo"
Mauricio Gómez: @Maogomez

"Me da risa, y es mi escape cuando facebook se pone monótono, cogratulations Vómitos"
Juan Sebastian Zuñiga: @juanse_Zuiga

"Le daría un 10 si solo se dedica a hablar de amor... nos hace falta. !Que cumpla muchos más"
Rolando Cardona: @Mammaperlindo

"Que le rinda, y ojalá para el próximo año temas más fuertes. Un abrazo y feliz cumple"
Lucas Botero: @LucasBotero

"Si hablaramos de mas vaginas y menos penes os juro que te leo a díario"
Constaza Ortiz: @connyort

"Éste blog es una mierda, sin embargo no dejo de leerlo. Felicidades en su primer año. ¿y cuando es que va a hablar de sexo?"
Marcos Gaviria : @Lagrimadepayaso

"Soy adicto a tanta vomitadera señor Sincleire, ya me mal acostumbró. Feliz primer año"
Ivan Ramirez: @Ivan_Ramirezg

"Me da risa el nombre, tenia que ser obra tuya. No es que lo lea, pero igual deseo que cumpla muchos más"
Vivian Garzon: @vivianja24

"Bizarro, fresco y natural, tal cual a su creador. que siga vomitando por mucho más tiempo, saludos a los desocupados que leen ésto"
Juan F, Riarte : http://facebook.com/jriarte1

"Amargo como él solo, y una pendejeada total, pero que bien lo hace. Felicidades george y que su blog siga embarrando mentes inocentes con sus vómitos"

"No se que coño hace ésto sobreviviendo un año, pero bueno asi es la vida, hay gente intensa. congratulations"
Juliana Rosillo "fulana germenes":
http://facebook.com/caperucita.droga

"Algo tan absurdamente extraño y bien hecho solo podia venir de tu mente. Que no se pierda ese color gris de tus escritos, y espero ver vómitos bien trasbocados. ¡Feliz cumple!"
Viviana Montes: http://facebook.com/viviana.montes.77

Es una pendejada lo sé, pero amigos  míos gracias por hacer parte de ésta pendejada, gracias por éste añito interrumpido de lecturas a media noche (que son las mas sabrosas) y gracias por sus sinceros comentarios. Seguiremos vomitando y de lengua viperina nos volveremos, preparados todos púes Vómitos mentales en su segundo año tal vez y solo tal vez, vendrá con más cianuro y menos azucar.
                      
                     
                      ¡¡FELÍZ Y GUARROS CUMPLEAÑOS, VOMITONES!!

PD: se esperan los saludos de los seguidores públicos... si quieren!





miércoles, 30 de mayo de 2012

UNA VACA BACANA

Desempolvando cosas viejas de mis multiples proyectos gráficos y escritos sin terminar, me encontre con éste  cuentico que me inventé un día de esos en los que la  mamera existencial ataca .  Recuerdo haberlo hecho con la sangre tan ácida como el limón, recuerdo tambien que se lo dediqué a mi único sobrino quien entonces no sabia leer (menos mal) y recuerdo haberselo leido cuando lo único que a el le importaba era taladrar con sus debiles dientes un pedazo de panela que quien sabe como y donde lo consiguió.
 he decidido publicarlo aquí tal cual como lo escribí aquella vez, sin ediciones, y sin correcciones de estilo (igual nunca las hago). Y dice así.



Lulú era… ¡Mentiras! Lulú es (porque no se ha muerto. Ni siquiera ha existido nunca). Decía que Lulú es una vaca. Lulú, la vaca, es una vaca de esas que no hay por aquí. Las hay por allí, que queda más lejos y contiene muchas vacas como Lulú, la vaca.
¡Ah! Olvidé decir... ¡Mentiras! No olvidé decir, porque éste es un cuento escrito; y en los cuentos escritos no se dice nada: se escribe. Olvidé escribir que Lulú era… es una vaca bacana. Como ya lo escribí, no lo volveré a olvidar.
Lulú, la vaca bacana, es bacana porque no dice nimú. Dice, en cambio, me, mi, ma, mo y hasta miau. Pío nunca ha dicho, porque no se sabe la pe… y no es ningún pollo. Mucho menos guau, porque sí se sabe la ge… pero no le interesa.
Un día, Lulú estaba pastando en un postrero. Te preguntarás, querido sobrino analfabeta, qué cucús es un postrero, y cómo es un día lulú.

Te responderé lo primero para que no te aburras…
Voy a sacarte de dudas… ¡Aquí vamos!… ¡Eeeeso!… ¡Ya casi!… ¡Listo, niño!… Ya no estás más en dudas… Ahora estás en problemas… Porque este cuento nada que se acaba, caba que se anada.
Un postrero es un potrero para una vaca. Mejor dicho: para una vaca un potrero es un postrero. Mucho mejor dicho: un potrero es un postrero para una vaca bacana. Como Lulú es una vaca bacana, pues para ella un potrero es un postrero… Porque el pasto que lo cubre sabe a postre para sus ojos. Mejor dicho: para su lengua. Mucho mejor dicho: para su gusto de vaca, de vaca bacána.
Cada hojita de pasto del postrero que masca Lulú,  le sabe a una fruta distinta (fruta en forma de helado, claro está): piña, fresa, mora, uva, coco, huevo, manzana, cereza, frambuesa, sabuesa, pistacho, vainilla, sapote-turrón… chocolate, guanábana, melocotón, hembrononón y mil doscientos cincuenta  sabores más.
Un día lulú es así: de todos los colores del círculo iris… ¿Conoces el arco iris?… Pues un círculo iris es el doble de bonito… ¡Lástima que sólo sale cuando llueve! Un día lulú huele a chicles de todas las frutas que ya dijimos (Yo las escribí y tu papá las leyó). En un día lulú, hace sol, hace luna y hace nubes, pero sin lluvia. Nubes de casi todas las formas. Mejor dicho: ca-si-tó das-las-for-mas. Peor dicho: de todas las formas, menos de ornitorrinco.
Ya que estamos de regreso, en un día lulú no suenan los teléfonos para interrumpir cuentos. En un día lulú, los niños no comen sopa… se la toman. En un día lulú, sale Pinocho tocando tambor… o en su defecto, sale Peter Criss, el baterista de KISS… o en su cualidad, salen los esqueletos de sus tumbas… ¡Chúmbala cachúmbala cachum balá! En un día lulú, nadie te leee cuentos aburridos… Te len cuentos pendejeos como éste.
Decía que un día lulú, Lulú, la váca bacana, estaba pastando en un postrero. Mejor dicho: estaba rumiando pasto. Mejor mejor dicho: estaba comiendo pasto. Si pastar es comer pasto… entonces sopar es comer sopa, panar es comer pan, galletar es comer galleta. Luego de eso, puedes platanar, bananar, jugar, cantar y paladar.
Lulú, la va ca ba ca na, estaba pastando en un postrero… cuando llegó Totó, el cucuñú, y le dijó ¡Bu!. Como era de esperarse, Lulú no dijo Nimú. No sólo porque no lo decía, sino porque Totó, el cucuñú, no asustaba ni a un bus, no cargaba ni una cruz y tenía un poco de pus para cantar blus. Totó le dijo que pum, que tuc, que chuz, que tun y que . Fue entonces cuando Lulú dijo ¿Yo?Sí, tú, dijo Totó… Lulú dijo ¿Tú?No, tú, no… Yo, dijo Totó, como todo cucú… ¿Yo?… Dijo la vaca bacana, Lulú… No, tú, dijo el cucuñú, Totó…
…Y así se la pasaron, se la pastaron y se la postraron toda la noche, tooda la maña y toooda la tarde lulú, Lulú, Totó, tú y yo…
fin… Mejor escrito: FIN
Posdata: esperemos que eñl día que sepas leer, me perdones por ésto.

oy y sápap sut somos euq sotnot ol ed atneuc sárad et ,séver la reel a sadnerpa odnauc


miércoles, 16 de mayo de 2012

PIEL INDIFERENTE!

Unos días atrás me salió una mancha roja en la piel, era pequeña y poco escandalosa así que decidí ignorarla. Mi piel suele tener repentinos brotes de cosas raras que desaparecen en algunos días . Alergias . Así que supuse que eso sucedería . Unos cuantos días adelante y la mancha se volvía cada vez más grande . Extraño . La dejé vivir todavía unos días más esperando que si la ignoraba, desaparecería . No fue así . Cada vez se hacía más grande y el rojo se volvía más un café claro . Ni modo, es hora de ir al doctor, cosa que detesto pero que aventajo gracias a que me madre es enfermera y su amistad con algunos doctores me hace agilizar ese tedioso proceso de pedir una cita medica.

Fui al dermatólogo, le tomó 2 segundos descifrar lo que tenía : una algergia con nombre mamón. Después dijo esta frase: “Tu piel tiene un sistema inmunológico indiferente” Me dijo que a mi piel no le importaba defenderse de nada, que cualquier organismo externo que la toque, le da igual. ¿Qué? Sí, así es.

El doctor me dejó ir con una pomada que prometió desaparecería la alergia de inmediato.
En el camino de regreso, no pude mas que pensar en esas palabras: “tu piel es indiferente”. ¿En serio? ¿Le da igual? O sea que ¿si alguien me toca, mi piel reacciona con los hombros levantados y un gesto de indiferencia? Me suena conocido.
Después de ese diagnóstico, visitar cualquier otro especialista será motivo de pánico. ¿Qué tal si voy con un cardiólogo y me dice lo mismo? “Caballero, usted tiene un corazón indiferente, por eso los latidos a destiempo” O un urólogo “Caballero, a su pene le da igual” ¡Cállate los ojos!

Caos mental. Estoy hecho de indiferencia. Si lo que cubre mi cuerpo es indiferente, ¿qué esperanza tienen los demás órganos?
Después de unos minutos dejé el drama a un lado y recordé las palabras que después dijo el doctor: “Hay pieles que se curan, que se recuperan. Así de la nada. No sabemos por qué y no hay medicina que lo haga, sólo pasa”.

Una ventana de esperanza. Tal vez, sólo tal vez, si dejo de pensar en la indiferencia y le ayudo a todo mi cuerpo con “pomadas” empezará a sentir algo, dejará de levantar los hombros y fruncir los labios.
Al final, es la indiferencia la que mata, pero la lucha contra ella la que hace que sobrevivas.

martes, 1 de mayo de 2012

LA FILAFILA

cuando se procesa una idea del infierno, en algún recoveco de la mente del ideador aparece una fila. infierno no es infierno sin una. lo del calor es lo de menos. el infierno es esperar en una fila; esa cadena fragmentada de seres humanos que deben detenerse en un solo lugar del universo, cautivos de la disposición de un tercero, quien, sin consultarles, los obliga a acumularse, uno a uno, uno detrás de otro, para que esperen algo, algo que llegará, algo que deberá ser entregado, algo que se informará, algo que se alargará.

La inusualísima visión de un banco con menos de cinco cuerpos conformando la fila de la que uno hará parte es bocatto di cardinale para el espíritu contemporáneo, acostumbrado a esperar y desesperar en este mundo que marcha a ritmo de cronómetro, a un segundo por segundo, a un siglo por milenio, etc. La filafila es la prueba suprema de la paciencia, de la resiliencia y del tesón para lidiar con el enemigo capital: el tiempotiempo; la invención más compleja e inevitable de la humanidad, por encima de dios y del rating (por algo, el papá griego de los dioses olímpicos es don cronos). Hacer fila es pararse sobre una baldosa, adquirir postura de mártir o de modelo de zapatos, y respirar lentamente, mirando al infinito imaginario, como un monje autista; es pararse sobre un andén, en una sola pata, como una garza burocrática, porque no hay de otra, porque aquello que perseguimos sólo se puede obtener al otro lado del cordón corporal, en esa terrible frontera comunicativa llamada ventanilla. Por eso, los bancos atraen a sus clientes con la carnada de “métase aquí, que le tenemos la conexión por internet, para que no tenga que hacer laputafila”. Pero internet no nos salva de las filas de reclamos en la etebé (más largas y constantes que las de pagos). Internet no nos salva de la fila para solicitar el pasado judicial, para que le probemos al mundo que no hemos matado a gaitán, ni robado un pan de supermercado.

Durante la filafila de lo que sea, nuestra mente divaga, a razón de mil palabras por imagen; se resuelven crucigramas y encrucijadas, se insertan alfileres vudú y se extirpan mocos de moco. La fila es el símbolo terrícola del mutuo desdén, del control del prójimo sobre el lejano. El que madruga a conseguir un buen lugar en la fila de la embajada de Alaska para que un fulano ocupe su puesto seis horas después, es un héroe digno de admiración, al que dios no lo ayuda, al que no le bastan mil cervezas de recompensa por tamaño sacrificio. Para pararse en una fila y persistir en ella sin desfallecer, es recomendable llevar un libro para leer durante aquellos minutos insufribles; ojalá un texto fácil y pop, del tipo el vendedor más sexy del mundo, bandeja paisa para el alma o los mejores 1000 chistes de esquimales). si no sabe leer de corrido, o le mama la literatura, tenga a la mano un reproductor de emepetrés, un disc-man, un walk-man o un watch-man, para meterle música a esa cabezota, que tanto gusta de delirios paranada. Si no posee ninguno de estos artefactos, levántese una amistad para hacerle la conversa. Se sugieren temas álgidos e inagotables como el calentamiento global, el enfriamiento piramidal o el entibiamiento cúbico. la idea es drenar el cerebro y hacer circular la materia gris; porque la filafila es el hervidero de sesos por excelencia. La masacre de pozzetto tuvo que haberse fraguado en el puesto 57 de una fila para pagar el impuesto al deporte............¡el quesigue!

martes, 13 de marzo de 2012

AMNESIA DEL DOLOR

Cuando un bebé nace, dicen que el dolor del parto es muy grande si se hace natural. Todos hemos visto por lo menos en películas cómo, cuando una mujer está dando a luz, grita incontrolablemente, suda, llora, puja, respira. Todos hemos, por lo menos escuchado, que parir duele y duele mucho. Sin embargo hay familias que tienen más de un hijo. Si el dolor es tan fuerte ¿por qué vivirlo dos veces? La teoría más conocida es que ese dolor, la mamá lo olvida, que así está programada la naturaleza. Si no fuera capaz de olvidarlo, no sería capaz de volver a tener hijos. Me pregunto entonces si esta teoría aplica cuando se trata del amor.

Todos nos hemos enamorado, por lo menos una vez (espero). Y todos nos hemos desenamorado, por lo menos una vez. El amor trabaja a la inversa que el parto. Enamorarse no duele nada, se siente, como supongo se siente, cuando ves a tu hijo por primera vez. Todo se borra. Todo es felicidad. No hay nada más grandioso en tu vida. Te sientes completo.

Pero el desamor, entonces, se puede comparar con la labor de parto. Duele y duele un jurgo. Gritas, sudas, lloras, pujas, respiras. Juras nunca volver a pasar por eso. Y digo que el amor trabaja a la inversa porque en el parto después del dolor viene la felicidad y en el amor, después de la felicidad parece sólo venir el dolor.

Pero entonces, si nos hemos enamorado más de una vez eso quiere decir que tal vez, sólo tal vez, nuestra naturaleza también está hecha para olvidar el dolor y poder repetir el amor. Si no nadie lo viviría dos veces. Si no nadie tendría más parejas.

Entonces es aquí donde se puede dividir el miedo (porque al final el dolor causa miedo). El miedo que todos piensan que le tienen al amor no es miedo al amor sino al desamor. ¿Por qué habremos de tenerle miedo a una sensación que provoca felicidad? No le tienes miedo a las alturas sino a caer desde esa altura. Entre más alto, más fuerte el golpe.

No. El amor no duele. Duele el momento en el que dejas de amar, en el que te dejan de amar. El dolor de parir la idea de que no estarás más con esa persona. O de que esa persona ya no te hace sentir lo que te hacía sentir antes. Gritas, sudas, lloras, pujas, respiras.
El pavor de la desintoxicación (es más fácil ser adicto que desintoxicarse).
El pavor a sufrir como todos sabemos que se sufre cuando se muere algo, alguien, todo.
Entonces, ¿será misericordiosa la naturaleza y nos dará el don de olvidar el dolor para un día volvernos a enamorar, a que se nos quite el miedo de caer? Como siempre, creo que la naturaleza hace su parte pero nosotros también tenemos que poner de la nuestra y tal vez fingir olvido para vivir amor.

lunes, 5 de marzo de 2012

HOMBRE DE CABELLOS BLANCOS

Subí al transmilenio (sistema de buses articulados de transporte másivo en Bogotá) y busqué un asiento con la mirada. Me di cuenta de que un anciano sentado junto a la ventana puso su mano en el asiento vacío que estaba a su lado para que no me sentara allí. Me hizo gracia y por lo mismo me senté justo detrás de él. Lo observé con cuidado. Su cabello, además de escaso, era completamente blanco. Cada vez que alguien subía, hacía el mismo gesto y se salía con la suya. Toda una leyenda.
Que todos o casi todos preferimos que nadie se siente a nuestro lado en el autobús, en el tren y en el metro es un hecho, pero no pasa de ahí, uno se aguanta o está tan ensimismado que le da igual. A él no le daba igual, no estaba dispuesto a aguantarse. Me pregunto si algún día llegaré a ese nivel de rechazo a la compañía. Espero que no, no creo. Como sea, era de noche, y era una noche linda, acababa de hablar con quien me arruga el corazón constantemente, era el último servicio expreso, estaba cansado aunque no había hecho gran cosa, en realidad había tenido un día más bien aburrido, no esperaba nada de un viaje relativamente corto de regreso a casa en transmilenio. Pero lo encontré a él y su sola existencia me alegró y tuve un viaje entretenido hasta el portal de buses donde debía bajarme. Descubrí entonces que la misantropía puede tener efectos raros como ese.

miércoles, 29 de febrero de 2012

CINCO MINUTOS


Esa pelea en la que dijiste algo que sabías que le iba a doler y que a los cinco minutos que salió de tu boca, deseaste nunca haberlo dicho.
Ese momento en el que regresaste de muy lejos para decirle algo y si hubieras llegado cinco minutos antes, se hubieran encontrado.
O esa vez que decidiste no esperarte cinco minutos más en el teléfono para ver si te contestaba.
Si hubieras volteado cinco minutos antes lo hubieras visto.
Si te hubieras levantado cinco minutos después te hubieras pegado.
En cinco minutos te diste cuenta que la querías besar y cinco minutos después del beso te diste cuenta que te equivocaste.
Faltaban cinco minutos para que se acabara la película y se fue la luz. Lo que permitió que empezaran a fajar cinco minutos antes de lo esperado.
El tiempo. Espectro impredecible que no sabe perdonar. Y aún así, si no existiera el tiempo, no habrían comparaciones, no habría drama, no habría orden, no habría imaginación, no habría música, baile, nada. Es el tiempo el que aparentemente quita el dolor. Es el tiempo el que ayuda a tener madurez. Es el tiempo el que se ríe de repente de nuestros planes por controlarlo. Y no, no lo podemos controlar, pero sí lo podemos usar a nuestro favor o en nuestra contra.
Son esos cinco minutos que decides esperar, los que puedes controlar. No controlas si pasan rápido o lo que sea que pase cuando esperas, pero sí puedes decidir utilizarlos. Son esos cinco minutos que nos detenemos a escuchar en vez de interrumpir.
Si la vida la viéramos como un cúmulos de momentos de cinco minutos, el tiempo parecería menos cruel. Poco a poco nos daríamos cuenta que así podríamos controlar más nuestro entorno, nuestro impulso y nuestras emociones.
Es el tiempo el que parece limitarnos, pero también es el tiempo el que nos da toda la libertad.

domingo, 29 de enero de 2012

DE OJERAS BUENAS, MALAS E INEVITABLES

Las ojeras: esas bolsas negras que se hinchan y viven debajo de los ojos como signo inequívoco de cansancio y/o estrés. Que también se traspapelan al mundo emocional y se muestran como cómplices del amor y el desamor en la vida.

¿Cuándo es que hay que estar orgullosos de nuestras pequeñas bolsitas de vida?
Enamorarte es desvelarte. Es no querer dormir con tal de aprovechar toda la vida que te queda para poder estar con esa persona. Son charlas hasta las tres de la mañana. Son salidas hasta las seis de la mañana. Son borracheras, idas al cine, cenas, bailes, música. Enamorarte es despedirte del descanso para cansarte suspirando. Y después empiezan las pijamadas. Tu cama, la suya. Y al principio, dormir es la última prioridad. Después, tratar de dormir es un esfuerzo casi cómico. Se tardan en acostumbrarse a sus movimientos nocturnos. Uno ronca, el otro habla, uno se despierta, el otro se preocupa. Ojeras. Grandes, negras, pesadas, felices. Son ese tipo de ojeras que da gusto presumir. Que merecen medalla. Que no hay porqué esconder. Son las ojeras del aprendizaje, de querer memorizar todo lo que es y lo que eres y lo que son juntos. Son las ojeras que siempre deberás recordar con cariño.

Y después vienen las otras ojeras. Las ojeras del desamor. Las ojeras de la confusión. Las que son testigo de las noches que te quedaste despierto tratando de entender qué paso. Son madrinas de tus noches de insomnio en las que pasas viendo películas que ya has visto mil veces, en las que pasas saliendo con amigos y tomando para olvidar que te duele. Son las ojeras del “¿Cómo me metí en esto?”. Las ojeras del “¿Y si l@ perdí para siempre?”. Son las ojeras que te recuerdan que a veces es más fácil estar soltero. Y después bautizas esas ojeras con nombres de amantes, de personas que te confunden, de decisiones que evades, de realidades que escondes. El desamor es un cúmulo de ojeras que guardan la evidencia de lo que un día fue cariño.

Al final la vida es un cúmulo de ojeras y está en nuestras manos decidir con qué tipo de ojeras queremos vivir. Pero algo está claro, las ojeras son inevitables.

martes, 10 de enero de 2012

PAPALOTE

By @ConnyOtz                               

Vagaba por ciudades y desiertos,
tan ligera el alma que no sentia su cuerpo.

Un papalote en vuelo, muy cerca del cielo,
muy cerca del sol, solo cálidos besos buscaba

Encontó un lugar, acurrucado en tus manos
acurrucado en tus pecho.

Justo ahí donde le pueden amar, donde el alma siente
y el cuerpo vuela en libertad.

Todo un papalote viviente
!vuela! !vuela! !vuela!

Sus alas vienen y van,
a donde la inercia del sentimiento vuelve halar.

Solo una sonrisa,
un felíz y mirar tierno le dan vida,
para hacer y amar en equilibrio perfecto
this is to love